El tiempo pasa....

... nos vamos poniendo viejos... como decía aquella canción de Mercedes Sosa..
Quién no ha ido a esos míticos paseos a la playa en la semana universitaria?, el que nunca lo haya hecho, no se queje si le llaman ñoño, porque todo el mundo, absolutamente todo el mundo ha ido a alguno, alguna vez en la vida. Cómo olvidar las municiones copetísticas con las que aparecíamos abajo del bus, como si nos fuéramos de carrete por un mes entero, y que por supuesto se nos hacía poco, entonces era cuando empezaba la mescolanza rancia que nos pasaba la cuenta la mañana siguiente. Bueh.. no tengo que decir que la tomatera empezaba antes de que el bus partiera, y que cuando llegábamos al clásico y nunca-muere Tabito, ya estábamos listos sin cachar ni una. El olorcito ese característico de la piscola es uno de mis más aférrimos recuerdos de esos paseillos. Esos paseos en que uno, con vaso en mano, se dedicaba a vagar, dando vueltas por entre las chorrocientas personas y saludando a quien cara conocida tuviera, y mientras más saludabas, más popular te sentías, obviamente rellenando el vaso donde se pudiera, so pretexto para jotearse al mino(a) mirado(a) del momento. Qué pasaba cuando mirábamos la hora? ¡Pero cóooomo!¡Si acabamos de llegaaar!!, decíamos los jugosos. Bueno, la cosa es que el jueves pasado reviví estas andanzas, pero sobria, la ñoña me fui en auto, con mis ñoños compañeros, DESPUÉS de clases a la playa, con unas latitas y nada más, y empecé con las clásicas vueltas... chucha gueón! no cacho a nadie!!, depresión. Los más viejos del paseo, puros novatos!, cosa no difícil sabiendo que ya hay cinco generaciones debajo mío. En fin, me reí de los jugosos, de los muertos que ni se deben acordar que fueron, me colé en la fila del baño y NO PAGUÉ, dado que era la única sobria y nadie me cachó jajaja.
Linda experiencia, sí... chori.. pero bueh.. no es lo mío ya.
Nicanor Parra

Hace ya algunos días que en el
Centro Cultural del Palacio de la Moneda, se encuentra la exposición de nuestro gran anti-poeta Nicanor Parra. Sólo para disfrutar y reírse de buena gana con las cosas que sólo a el se le pueden ocurrir y sólo a él le permitimos. Por supuesto que no falta su cuota de humor negro que hace más sabrosa la cosa. 100% recomendable, para entretenerse un rato y mirar una exposición totalmente fuera de lo común. Guía? hay, pero a veces le dan muchas vueltas y sobre-interpretaciones a las obras que talvés ni las tienen, pero útil para saber el contexto en el cual fueron creadas.
Precios muuuy módicos, $300 estudiantes.. sí! $300.
Hasta el 06 de octubre. Centro Cultural Palacio de la Moneda. Metro Moneda.
panorama dominguero

Para esos domingos en que sale el solcito, nada mejor que salir a pasear, y una muy buena alternativa es ir a dar una vuelta por el Parque Forestal, donde hay infinidad de cosas para hacer. Se puede pasar a ver alguna exposición en el
MAVI (Museo de artes visuales), o al
Bellas Artes, o también al
MAC (Museo de arte contemporáneo). Si se desea se puede revisar la feria de las pulgas que se pone cada domingo para encontrar algún shishe o cashureo porque ahí está "tudu barato tudu barato". Al caer la tarde un rico chocolate caliente en alguno de los muchos café de la calle J. Manuel de la Barra o una limonada frappé deliciosa cuando el calor agobia. Otra alternativa muy deliciosa es ir al
Emporio La Rosa, salón de té y heladería, donde sobresalen sus sabores nuevos y diferentes. Recomiendo el chocolate pepperoncino si les gusta un poco de picante, chocolate naranja y miel de ulmo, lúcuma manjar... um!
Si quedan pies y ganas, el paseo puede seguir por la
Feria de las nuevas tendencias, para ver ropita muy linda y única además... para no encontrarse con nadie igual vestdo que uno!!. De todas maneras hay que conocer el nuevo
Patio Bellavista, donde hay de todo, vinos, helados, artesanía... un poquito más pa turistas gringos, pero lindo al fin y al cabo.